miércoles, 22 de octubre de 2025

Crítica: Una batalla tras otra (2025) Paul Thomas Anderson. La carga de un fracaso.



En 161 minutos, Una batalla tras otra (2025), Paul Thomas Anderson explora la decadencia subversiva y la moral supremacista de EE. UU. a través de giros narrativos que mezclan sátira y dramatismo. La personificación de este declive es Bob/Pat (Leonardo DiCaprio), un experto en explosivos que revela su patetismo en un plano detalle: fumar marihuana antes de entrar al colegio para una entrevista con la profesora jefe.

Esta película toma como referencia la novela Vineland de Thomas Pynchon, como el declive de los ideales de los años sesenta y la dinámica de preparación de los militantes. Estos aspectos son trasladados a un contexto histórico atemporal, pero que incluye tecnología contemporánea.

En este marco, opera en la clandestinidad de los EE.UU. el grupo rebelde “French 75”. Compuesto principalmente por revolucionarios afrodescendientes, el grupo libra una situación de guerrillas marcada por la audacia: liberan inmigrantes mexicanos en la frontera, roban bancos, explotan torres de alta tensión y en la adrenalina tienen sexo.

Bob/Pat (Leonardo DiCaprio) es un experto manipulador de bombas caseras y tiene una relación con la líder, Perfidia Beverly Hills (Teyana Taylor). Este vínculo se complica con la llegada del bebé, Willa (Chase Infiniti), lo que fuerza a los padres a una encrucijada existencial: la vida revolucionaria o la familiar. Las malas decisiones de Perfidia traen a modo de consecuencia que el grupo pase a la inacción y a la clandestinidad, pero manteniendo los códigos subversivos. En este contexto de calma forzada, reaparece el Coronel Steven J. Lockjaw (Sean Penn en una de sus mejores actuaciones), quien inicia un viaje a la frontera estadounidense motivado por la ideología de la pureza de raza y la venganza para resolver asuntos pendientes.

El Coronel Steven J. Lockjaw se inserta en el universo de militares paranoicos y desquiciados del cine estadounidense (similar al personaje de Jack Nicholson en A Few Good Men, 1992), sirviendo como la encarnación militar obsesionado por ascender socialmente entre sectores conservadores que creen en el racismo y cuya obsesión se expone a través de una caricatura tóxica e irracional. La doble moral queda expuesta cuando se descubre, mediante archivos, que en el pasado manifestó un deseo contrario a la ideología que ahora defiende.

El Bob Ferguson de Di Caprio de esta película es similar al del doctor Randall Mindy (Don't Look Up, 2021), personajes altamente funcionales en sus áreas, pero que, frente a un desdichado evento, pierden credibilidad y se tornan patéticos para sus más cercanos. Bob/Pat se vuelve una figura desencantada y pusilánime, pero se configura una premisa del cine hollywoodense de la figura del padre que hará todo lo que esté a su alcance para salvar a Willa.

Al igual que en anteriores filmes del director, la película se estructura en contrastes. El primero es el conflicto entre Willa y Bob: él vive en constante paranoia y solo busca proteger a su hija en la clandestinidad, mientras que ella desea vivir su adolescencia con normalidad y sin preocupaciones. Este dilema personal se refleja en un contraste político mayor, donde la generación de los padres fracasó en su lucha por cambiar la sociedad, mientras que las siguientes intentan buscar la transformación de manera individual. Finalmente, el tono de la cinta navega entre el drama y el alivio cómico intencionado desde el guion, con actuaciones exageradas diseñadas para generar carcajadas.

La visión de Paul Thomas Anderson es que la lucha de los padres en Una batalla tras otra sí resultó fallida, una carga inherente que debe ser transferida a la siguiente generación. Una conclusión que contrasta con el enfoque del cine político chileno (Calle Santa Fe 2007, La ciudad de los fotógrafos 2006, las películas y series sobre el FPMR y la filmografía de Patricio Guzmán), donde la lucha pasada se enfoca en reivindicar la memoria y el coraje de la lucha pasada con un tono más serio, no en heredar un fracaso.


One Battle After Another

Director: Paul Thomas Anderson

Guion: Paul Thomas Anderson. Novela: Thomas Pynchon

161 minutos.

Reparto: Teyana Taylor, Leonardo DiCaprio, Regina Hall, Sean Penn, Wood Harris, Alana Haim, Shayna McHayle, Shayna McHayle.

Compañías Warner Bros., Ghoulardi Film Company. Distribuidora: Warner Bros.