Valdivia en su particularidad lejos del hipercentralismo nacional no está exento de los devenires políticos-históricos. El Golpe de Estado de 1973 que asoló a la población, a la industria maderera y a la universidad provocó que los profesores e intelectuales sean encarcelados y exiliados; los obreros sindicalizados asesinados y desaparecidos; y familias todavía buscando el esclarecimiento de la verdad. En términos literarios, en la década del sesenta aparece la escuela de poesía llamada Trilce en la Universidad Austral, liderada por Omar Lara y de acuerdo a preguntas inquietas, comentarios de pasillos y memorias literarias se evidencia una forma de trabajo que las generaciones en dictadura replicaron.
50
golpes. Muestra poética a los cincuenta años del golpe de Estado (2023) es un volumen antojadizo como toda antología y no
tan estricto como intentan afirmar sus compiladores: el doctor en literatura
Jorge Polanco; la poeta y bibliotecaria Cristina Gallardo; y el sociólogo
Jonathan Opazo. Y es que uno desearía que se presente una cartografía literaria
del sur de Chile, sin embargo, las palabras iniciales que conforman esta
muestra no corresponden a la tradición literaria que antecede a este libro.
Podemos encontrar la de Iván Carrasco y Yanko González: Poesía Universitaria en Valdivia (2000), David Miralles y Óscar
Galindo de Poetas actuales del sur de
Chile (1993). Incluso, la Cuarta
antología prosistas y poetas valdivianos (2016) de la Sociedad de
Escritores de Chile (SECH) contiene un prólogo mayor al presente sobre
publicaciones históricas y vínculos literarios de la Filial Valdivia.
Revisando los poemas aparece uno de los más importantes de
la poesía valdiviana y poco leído/difundido en Santiago. Jorge Torres Ulloa, en
Poemas encontrados y otros pre-textos
(originalmente publicado en 1991 y Obras Completas, 2013), toma diversos
recortes de periódicos, los cambia de sitio, ampliando las posibilidades de la
interpretación. El elegido para esta exhibición, es una entrevista gráfica a
una persona que no es mencionada, la cita es la siguiente: “-¿escribió alguna
vez un poema? - ¿Quiere que le diga una cosa? ¡Odio las poesías! Ni leerlas, ni
escucharlas, ni escribirlas, ni nada”. Este fragmento de entrevista no tiene
ninguna relevancia a priori, pero
para lograr comprender lo importante radica en la coyuntura política de quién
es el entrevistado y lo connotativo se modifica si se incluye originalmente la
referencia: “A. Pinochet U. Entrevista
Revista Mundo N° 89”. Así, cuál villano enmascarado en esta primera edición no
está exhibido fielmente el texto poético.
¿Y, por qué habría que apelar a la memoria literaria en
Valdivia? Ejercer la memoria es reconocer y dar cabida a una tradición que poco
se enseña, una escuela literaria conformada por hombres y mujeres bajo el alero
de la universidad que permitieron que el ejercicio literario siguiera en
producción en tiempos complejos. Además,
la misma introducción apela a la memoria: “Árbol de la memoria,
agregaríamos, no cedamos a los apagones y violencias de los oscuros poderes de
Chile que no han dejado de acechar”. Por lo mismo, la presentación propone
varias temáticas pero tres estudiosos de la literatura evitan ahondar en los
argumentos y los diversos contextos. A saber, el intelectual Grínor Rojo, Omar
Lara, Guillermo Araya, Clemente Riedemann y Jorge Torres Ulloa que cantaba
entre rejas “Alfonsina y el mar” fueron
encarcelados por su pensamiento político al momento del Golpe y produjo que
fueran exiliados o exonerados.
La escasa consistencia de la presentación señala: “lxs
poetas incluidos son de diferentes generaciones y han optado por vivir en el
sur austral”. En estricto rigor, no todos los mencionados residen, al momento
de la publicación, en dicha localidad geográfica y se observan excepciones. En
este mismo sentido, los compiladores agradecen a aquellos que enviaron textos,
pero el poeta Omar Lara que falleció hace un par de años, dudo que haya enviado
desde el más allá. Entonces, hay una suerte de flexibilidad de criterios que
fue lo primero en llamar la atención. Y ante estas imprecisiones uno se
preguntaría por los ausentes: Guido Eytel, David Miralles, Hans Schuster, José
María Memet, Carlos Trujillo, Jorge Ojeda, Nelson Torres, Juan Armando Epple,
Luis Zaror, Luis Cárcamo Huechante, Luis Oyarzún, Carlos Cortínez, Enrique
Valdés, entre otros.
Ante la oportunidad de conmemorar los cincuenta años del
Golpe, la manifestación de este libro significa recordar y no marginar. 50 golpes. Muestra poética a los cincuenta
años del golpe de Estado (2023) no presenta coordenadas literarias, no
llama al estudio poético del sur profundo y está firmado por tres autores que
bien pudieron haber entregado una mejor introducción como cuando reseñan libros
de poetas de la zona central. Por lo mismo, aquel error descrito en que no aparece
la referencia literaria y que permita al lector comenzar a interpretar el poema
de Jorge Torres es bastante negligente. Por lo mismo, frente al olvido, más
escritura.
50
golpes. Muestra poética a los cincuenta años del golpe de Estado
2023
Compiladores: Jorge Polanco Salinas, Cristina Gallardo
Jiménez, Jonnathan Opazo Hernández
100 páginas
UACh ediciones.-
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